miércoles, 14 de abril de 2010

Las costuras de la sanidad revientan

La crisis pone a prueba el sistema nacional de salud - Sin cambios, el modelo, aquejado de déficit crónico, puede zozobrar

LUCÍA ABELLÁN / MARÍA R. SAHUQUILLO - El País - 12/04/2010

La cobertura universal de un sistema sanitario muy eficiente es el sueño mejor cumplido del Estado de bienestar español. La crisis no ha frustrado (aún) esa realidad, pero hace vislumbrar el abismo de una situación estructural que, a largo plazo, pone en cuestión el sistema si no hay reformas.

La cobertura universal de un sistema sanitario muy eficiente es el sueño mejor cumplido del Estado de bienestar español. La crisis no ha frustrado (aún) esa realidad, pero hace vislumbrar el abismo de una situación estructural que, a largo plazo, pone en cuestión el sistema si no hay reformas: el envejecimiento de la población, la cronificación de enfermedades, la exigencia de más prestaciones y nuevos tratamientos más caros o un gasto farmacéutico que crece a niveles de récord hacen inviable mantener la eficiencia sin más medios o una gestión diferente.

La visita al médico ha dejado de ser una excepción en el día a día de los españoles. De concebirse como un sistema de último recurso y limitado a algunos colectivos al principio de la democracia, la sanidad se ha convertido en el elemento más universal del Estado de bienestar. Antes de que el doctor House irrumpiera en las pantallas de televisión, los españoles ya tenían una atención hospitalaria similar a la que se dispensa en la serie. Y, con matices -sobre todo de tiempo-, el sistema público ensaya ese modelo garantista. La diferencia está en la factura. Mientras que en la ficción estadounidense la abona el usuario, en España el sistema público se hace cargo de todo: una grandeza del modelo europeo que la crisis fiscal pone a prueba. La sanidad absorbe 60.000 millones de euros al año, lo que representa un 6% del PIB y un tercio de los ingresos que recibieron las arcas del Estado el año pasado. Y los gastos no dejan de crecer. ¿Hasta dónde estamos dispuestos a financiar? ¿Cuánto tiempo más puede sostenerse este modelo aquejado de un déficit crónico?

Los años de exuberancia económica han excluido del debate político la financiación de los servicios públicos, entre ellos la sanidad. Pero mientras la rentabilidad del ladrillo nutría las arcas públicas, el gasto médico crecía a ritmos muy superiores al de la economía (de dos dígitos en algunas comunidades entre 2003 y 2007, según datos del Ministerio de Sanidad). El envejecimiento de la población -en diez años uno de cada cinco españoles tendrá más de 65 años, según la OCDE- y la proliferación de enfermos crónicos, la mejora de la atención y el imparable avance tecnológico han encarecido un sistema que comenzó siendo básico y se ha extendido hasta constituir incluso un atractivo para extranjeros. En un momento en que la hucha del Estado arroja desequilibrios del 11,2% del PIB, uno de los mayores de Europa, se impone una reflexión sobre el gasto y el ingreso.

La financiación sanitaria "va a ser el principal quebradero de cabeza en la vida política y social de nuestro país", dispara Luis Ángel Oteo, experto de la Escuela Nacional de Sanidad, adscrita al Ministerio de Ciencia. La primera pista la otorga el reciente acuerdo sanitario alcanzado entre el Gobierno y las comunidades autónomas, que han exhibido aquí una agilidad para el pacto que parece imposible en cualquier otra materia. El coste de sufragar un sistema de calidad (alrededor del 6% del PIB, sin contar con las cantidades destinadas al sistema privado) y el crecimiento exponencial de esas partidas ha concienciado a los responsables políticos para intentar contener la hemorragia.

Nadie quiere hablar de lujos ni de despilfarro. Porque la asistencia española es más barata que la media. Con 1.816 euros anuales per cápita proporciona una atención integral a toda la población. ¿Qué seguro privado ofrecería prestaciones similares a ese coste? Representa la mitad que en EE UU, cuyo sistema, privado, resulta más oneroso que el público.

El secreto del relativo bajo coste español reside en los salarios de los médicos, que suponen alrededor de la mitad de los gastos del sistema. "No pagamos bien a nuestros profesionales. La retribución no es para tirar cohetes", expone Manel Peiró, experto en gestión de sistemas sanitarios de Esade. Aunque tradicionalmente la figura del funcionario despierte suspicacias, el personal sanitario no está especialmente bien remunerado, como lo demuestra el hecho de que en ocasiones los médicos en formación deciden emigrar a Portugal, con menor nivel de vida que España pero con mayores señuelos salariales. Hay países en los que los profesionales sanitarios no son funcionarios (en Reino Unido o Dinamarca), y las remuneraciones son mejores.

A pesar del ahorro en esa partida, el sistema arrastra un permanente desfase entre ingresos y gastos. Aun cuando las competencias sanitarias las gestionaba el Estado se tendía a presupuestar por debajo de lo necesario con la idea de que eso mantendría a raya las cuentas. No fue así. En la actualidad, los expertos apuntan a que hay unos 12.000 millones de euros de déficit sanitario acumulado -y que puede superar los 50.000 millones en 2020, según un estudio de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea)-, un término del que recela el Ministerio de Economía, pues al no haber unos ingresos específicos asignados, no cabe hablar de agujero. "Siempre ha habido una diferencia entre el gasto real y el presupuesto en torno al 10%", aclara José Martínez Olmos, secretario general de Sanidad.

Resulta difícil mantener esa brecha en el tiempo, máxime cuando las cuentas públicas se asoman al abismo. En noviembre la Comisión Europea pidió al Gobierno reformas en sanidad y pensiones -"dado el peligro que suponen para la sostenibilidad a largo plazo de las finanzas públicas"- frente al déficit. "El sistema así es totalmente insostenible: o se da un tijeretazo en el gasto o se suben los impuestos", resume Ángel Laborda, director de coyuntura de Funcas, la fundación de las cajas de ahorros. Es el sentir de la mayoría de los expertos consultados, que ofrecen alternativas en los dos capítulos.

Todos los analistas valoran la calidad de la asistencia y abogan por mantenerla, conscientes de que el reto demográfico no hará sino ponerla a prueba. Salvo alguna excepción, el rechazo a recortar prestaciones es rotundo. "No es posible ni deseable. Tendría incidencia en derechos individuales. Es muy complicado, sobre todo porque el nivel no es excesivamente alto", argumenta Alfonso Utrilla, experto en financiación autonómica de la Universidad Complutense de Madrid. En efecto, pese a los atributos del sistema, aún hay prestaciones básicas como la dental que no se ofrecen en todas las regiones. "Recortar prestaciones debe ser lo último", añade José Sánchez Maldonado, catedrático de Hacienda Pública por la Universidad de Málaga. Una opinión que compare la responsable de políticas sanitarias del PP y ex ministra del ramo Ana Pastor: "Deberíamos incluso aspirar a incorporar más".

La única voz discrepante en este aspecto proviene de Manel Peiró. Sin apuntar a un recorte en los servicios ya disponibles, el experto de Esade anima a "revisar las prestaciones nuevas que se van introduciendo" con la idea de que "algunas no entren". Peiró pone como ejemplo un sistema similar al de las aseguradoras, en el que "hay que ver qué entra". Con matices, ése es el sistema estadounidense, que el presidente Barack Obama ha intentado desterrar y que sólo en parte ha conseguido corregir para hacerlo más universal. Paradójicamente, uno de sus defectos es el alto coste público que genera sin garantizar una asistencia completa.

Lo que sí se hará a partir de ahora, según el plan del Gobierno, es analizar al milímetro con criterios de coste y eficacia cada nueva tecnología, medicamento o prestación que se incorpore al sistema. Algo que muchos echaron en falta cuando se introdujo en el calendario vacunal la inmunización contra el virus del papiloma humano. Un preparado que cuesta unos 400 euros y que no siempre libra a las mujeres de padecer en un futuro cáncer de cuello de útero. El debate sobre costes cuando lo que hay en juego son vidas siempre será polémico.

Más consenso genera la idea de recortar -o racionalizar, como gustan de decir los expertos- el gasto. Uno de los principales puntos de fuga es el capítulo farmacéutico. Ahí España no puede presumir de estar por debajo de sus socios europeos. El pago de recetas se lleva el 32% de los recursos sanitarios (el 25% en la Unión Europea). Las soluciones aportadas varían. La primera es fomentar el uso de genéricos -hay expertos que llegan a proponer una cobertura pública del 100% en esos medicamentos para disuadir el uso de los de marca-. También controlar las dosis, muchas veces desproporcionadas para la dolencia que se pretende atajar. "Uno de los retos pendientes es adaptarlas a lo que necesitan los pacientes. La unidosis es una medida eficaz que no supone recortes", reflexiona Ana Pastor. Ángel Luis Rodríguez de la Cuerda, director general de Aeseg, que agrupa a los fabricantes de genéricos, se queja de que en España estos medicamentos sólo representan el 9% del total, frente al 40% de otros países europeos. "El precio de los genéricos no crece pero sí aumenta el número de recetas por persona. Eso es lo que habría que controlar", reclama.

También hay quien sugiere que los pensionistas, exentos de cualquier aportación, sufraguen el medicamento como los demás en caso de gozar de rentas altas. "Hay pensionistas que cobran más de 3.000 euros [la pensión máxima apenas supera los 2.000 euros y la media se fija en 775, pero hay beneficiarios que disfrutan de otras rentas] y que no pagan nada por fármacos, y rentas de 600 euros al mes que pagan el 40% de la factura farmacéutica. No es equitativo. Hay que repensarlo. Todo lo que sea copago debe vincularse a la renta", esgrime Antonio Cabrera, de la Federación estatal de Sanidad de CC OO.

Más allá de esas medidas, hay margen para agruparse en una central de compras (que puede ahorrar un 20% de la factura, según el Gobierno), contener los salarios de los profesionales o frenar las contrataciones, como se ha acordado recientemente con las comunidades, pero no dejan de ser recortes modestos. En total, el Gobierno baraja un ahorro de unos 2.500 millones.

Pero una vez quede atrás lo peor de la crisis, la mayoría de los expertos abogan por aumentar los ingresos. Con el desplome de la presión fiscal (6,5 puntos del PIB) en los dos años de crisis, es imposible pensar en mantener el mismo nivel de prestaciones sin tocar los ingresos. Aunque subir impuestos podría resultar precipitado en medio de esta incertidumbre económica, muchos expertos creen que tarde o temprano habrá que hacerlo. "Hay que preguntarles a los ciudadanos qué quieren con el nivel de impuestos que tenemos", reta Máximo González, presidente del Consejo General de Colegios de Enfermeros.

De momento, la alternativa más mencionada es el copago. No tanto como vía recaudatoria, sino más bien como un elemento disuasorio del uso excesivo del sistema. Un par de euros o tres, señalan sus partidarios, invitan a pensar dos veces si la visita al médico es necesaria. Muchos países europeos explotan este sistema, que suscita la siguiente objeción: "¿Y si quien realmente lo necesita no tiene ni para ir?", se pregunta Sánchez Maldonado. "El riesgo de expulsar a gente que lo necesite es grande", responde el secretario general de Sanidad.

Mientras los economistas se avienen al menos a hablar de ello, en los médicos suscita un rechazo frontal. "No podemos introducir copagos. Estamos de acuerdo en delimitar una demanda que se desboca, pero tiene que haber alternativas", enfatiza Juan José Rodríguez Sendín, presidente de la Organización Médica Colegial.

Hay muchos tipos de copago: una cantidad fija sobre la consulta, un porcentaje del coste del servicio, un dinero que se adelanta y luego se reembolsa... Buena parte de los consultados considera que debería gravarse al ciudadano en función de su renta, lo que implica un importante coste organizativo (justificar rentas, crear un perfil específico para el usuario...) que disuade a la hora de aplicarlo. No obstante, dada la experiencia de otros países, quizá sea la vía por la que más fácilmente se encaminen los proyectos futuros.

Una deficiencia casi más pedagógica que real del sistema es la falta de recursos exclusivos, los llamados impuestos finalistas. La sanidad, ahora competencia de las comunidades autónomas, se financia con una cesta común que el Estado dispone para servicios básicos (educación, sanidad, dependencia...), financiada exclusivamente con impuestos. Cada comunidad asigna el porcentaje que quiere, al que puede añadir otros tributos de su propia cosecha. Un sistema que encaja bien con el estado descentralizado, pero que la mayoría de expertos se muestra partidario de modificar. Sostienen que debería haber una partida de presupuesto exclusiva para Sanidad. Carmen López, secretaria de Política Social de UGT, va más allá: "Todo el paquete de financiación sanitaria debe ir con carácter finalista al conjunto de las comunidades, así se haría un análisis real del gasto sanitario".

Caso aparte son los llamados impuestos finalistas, cuya recaudación se dedica sólo al fin para el que fueron creados. Y sólo el llamado céntimo sanitario sobre los hidrocarburos, aplicado en varias autonomías, tiene como fin la sanidad. Un sistema que algunos abogan por ampliar. "Los impuestos tendrían que ser finalistas. Debería acordarse entre las comunidades, para que todos supiéramos que ese porcentaje va al sistema", reflexiona Fernando Lamata, consejero de sanidad de Castilla-La Mancha, con gran trayectoria de gestión en ese campo.Seguramente los ciudadanos apoyarían asignar a la sanidad la recaudación de todo aquello que perjudica a la salud (el tabaco, el alcohol, los hidrocarburos). Y aceptarían de mejor grado impuestos exclusivos para financiar la salud que para otros fines más difusos.

Ese será el gran debate de los próximos años. Cómo financiar un sistema sanitario digno de los pacientes del doctor House -y codiciado por vecinos como los portugueses de Valença, que acaban de perder su centro y acuden al gallego de Tui- con unos recursos públicos víctimas del pinchazo inmobiliario. "No se puede hacer el milagro de los panes y los peces", concluye Ángel Laborda.

19 comentarios:

Ángel Ceballos Ortiz dijo...

¡Excelente aportación, Janine!

Beatriz Riquelme García dijo...

En este texto se hace referencia a un problema que ya vamos padeciendo mucho tiempo , pero que en la ctualidad con la crisis se agrava mucho más.
El gobierno saca sus cuentas y calcula el dinero que destinara a la seguridad social ,que llegue y se emple para los fines a los que va dirigido no lo sé; probablemente son tan excasos para tantas necesidades que apenas se note.

La política de la sanidad, también requiere cambios pero sin perjudicar ni a los pacientes ni a los empleados .Desde la llegada de la crisis las listas de espera en los centros de salud y hospitales son interminables, y ademas si tenemos en cuenta que en nuestro país no se le niega la atención sanitaria a nadie esto incluye desde la gente que viene a trabajar como a los turistas, los cuales muchos de ellos no encuentran solución a sus problemas en sus respectivos paises.

En mi opinión, no veo lógico que en centro de salud , no haya un mínimo de aparatos con los cuales se llegue a una conclusión sobre el problema que afecta al enfermo , liberandolo de viajes innecesarios , de visitas a otros centros y un consiguiente empeoramiento por el tiempo de espera. Mucho peor lo tienen las personas que necesitan transplantes o que padezcan enfermedades crónicas o las llamadas enfermedades raras que tienen que desplazarse a otro paises para poder tener medicación o ser operados, porque en España aunque tenemos buenos médicos no hay presupuestos para estudiarlas.

España necesita una reforma sanitaria urgente como afectada no quiero menos de lo que me dan hoy dia , pero tambien se que el paro con el 20% de personas que dejan de trabajar tambien dejan de cotizar a la seguridad social y por consiguiente debilita el presupuesto, tampoco se puede presionar al personal médico porque sino estos cada vez más se irán a otros paises donde ganen máas; es injusto con lo costoso de una carrera de medicina terminar en otro país.

A mi parecer creo que deberían de reunirse personas cualificadas y poner problemas y cifras e intentar poder sacar adelante la seguridad social española , teniendo en cuenta el porvenir de los empleados y afectados, que al fín y al cabo somos Todos.

+Beatriz Riquelme García 1bacb :)

Unknown dijo...

yo pienso que por muchas cosas que digan los distintos ministros por solucionar la crisis no van a hacer nada porque nunca se ponen de acuerdo simplemente por no dar la razón al otro cuando sabe que la tiene y asi va el mundo.
En cuanto a los medicos en España yo pienso que no estan bien tratados ya que no le dan la importancia a la medicina ni a lo medicoa y a la farmacia que necesita.No es justo que los medicosa españoles se tengan que ir del pais para poder ganar más dinero o el dinero justo que merecen porque aqui en España no les pgan lo que les corresponde , y que luego en el servicio sanitario publico te pongan extranjeros que no se enteran de lo que pasa y la gente que alomejor no se puede pagar una clínica privada , no pueda recivir el tratamiento que necesita en la sanidad publica porque el medico extrajero no se netera de lo que le pasa.

ANA Mª BERNÁ MARTÍNEZ 1ºBAC B

Unknown dijo...

El sistema sanitario español es uno de los más desarrollados en la actualidad , puesto que cubre la mayoría de necesidades sanitarias de los habitantes de este país y del que en muchas ocasiones se benefician extranjeros . Pero , como dice en el texto hasta cuando el dinero que sustenta dicho sistema será el suficiente para seguir cubriendo todas las necesidades de los que lo requieren , esto es una cuestión muy importante , puesto que el ritmo al que vamos muy pronto el sistema no podrá sustentar nuestros gastas sanitarios , la mayoría de veces innecesarios. En mi opinión se habría de poner algún “stop” en este uso innecesario de la sanidad pública para que de este modo pueda sobrevivir un tiempo más prolongado o una medida que no gustara a la mayoría que es la subida de impuestos –que ningún gobierno quiere- para poder así mantener al sistema. En el tiempo de crisis que corre el gobierno no ha de malgastar el dinero público en cosas innecesarias ya que lo requieren los jubilados y el sistema sanitario que al ritmo que vamos pronto no podrá cubrir nuestras necesidades sino se busca un remedio.


Hernán Cullishpuma 1 Bac b

Unknown dijo...

Bien es cierto que España tiene un sistema bueno del cual países como America quieren copiarlo es decir hablamos de la seguridad social, por una parte es un buen sistema pero como todo tiene virtudes y defectos las virtudes podríamos decir que son asistencia sanitaria a toda la población sin exclusión de nadie el hecho es que muchos extranjeros viene a España a los hospitales para recibir asistencia medica por otra parte no es tan costoso como en America por ejemplo es decir si pagamos con nuestros impuestos pero no la cantidad tan desmesurada que pagan los americanos y que todos de hecho no pueden pagar.
Los defectos son que las listas de espera estoy totalmente de acuerdo con mi compañera Jannine son interminables y el paciente puede llegar a morir esperando, también estoy totalmente en contra de que para uh simple radiografía tengas que desplazar te y tu centro sanitario no este dotado de una maquinaria minima además bueno en nuestro país los grandes hospitales donde trabajan grandes profesionales todo hay que decirlo están muy lejos de los pacientes ya que la especialización de una medicina por ejemplo neumología solo esta en valencia para lo comunidad valenciana cuando en Alicante también podrían dotar de este servicio sus hospitales ya que a diario se esta formando gente para ello.

Por eso el dinero que invertimos a veces se va por el alcantarillado por así decirlo en cocas innecesarias pero solo a veces podríamos decir. Ya que por ejemplo en la nueva fe se han gastado 386 millones de euros para hacer un gran hospital a la cabeza de Europa pero no creéis que también esto debería existir en Alicante, Castellón es decir que cada comunidad este dotado de este servicio sin tener que desplazarse a tanta distancia para recibir esta asistencia.


En conclusión pienso que deberían mirar por la comodidad de las personas para recibir asistencia medica en su lugar de origen y dar más maquinaria que se necesita aun simple centro de salud.

Sergio Jodar Serna dijo...

En efecto, la cobertura médica de la sanidad pública española es objetivamente muy buena y más, comparada con la de otros países, como los EE.UU., donde ahora ha saltado a los titulares de toda la prensa que una parte importante de la población americana carece de cobertura médica. Muchos extranjeros vienen a España para recibir asistencia medica y como mis compañeros dicen las listas de hoy en dia son interminables y los pacientes pueden llegar a morir esperando, en EEUU si se puede acceder pero por un seguro de salud privado, la ventaja del seguro privado es que las compañías tienen sus propias redes de hospitales, clínicas y laboratorios, por lo que los asegurados no tienen que esperar tanto para ser tratados. El único problema en el seguro privado esque las compañías pueden insistir a los pacientes en que utilicen sólo médicos que sean miembros de su grupo, pero la mayoría de las personas de allí no pueden permitirse ese lujo y asisten a la sanidad española pública.

Cuando hablamos sobre la Seguridad Social no nos referimos a la sanidad sino a prestaciones económicas para satisfacer cualquier necesidad.

Para terminar puedo decir que este tema todavía va a dar mucho que hablar en el futuro pero con el objetivo de mejorar el sistema para para la población.

Aurelio Aguilar Serna dijo...

En este texto se destaca un tema muy interesante y que se debería de debatir mas en España ya que la sanidad en España es una de las mas avanzadas y por ello nuestro presidente zapatero debería de poner un remedio para este problema tan importante como lo es la salud de España.

Estoy muy de acuerdo con Janine en cuanto a lo que dice sobre el tiempo que hay que tardar para que seas atendido decentemente, tanto tiempo puede tardar que cuando vas a ir a que te den una solución que cuando estés enfrente del doctor ya se te halla pasado la enfermedad. ¿Para eso pagamos la seguridad social? ¿Para que seamos atendidos de esta manera?.

También veo horrible es que tengan que venir médicos extranjeros a nuestro país porque no sean pagados como debe ser, ya que la sanidad es un recurso fundamental para cualquier país.

Yo creo que finalmente si queremos tener una buena atención sanitaria deberemos de pagar a los hospitales privados.

Además como bien ha dicho Janine, en este texto dicen que se han gastado una cantidad de dinero excesiva en tantos aparatos para nuestra salud… porque cuando tenemos que hacernos alguna prueba relacionada con nuestra salud tenemos que ir a un hospital lejos de nuestra estancia, no me imagino si tuviera que ser un aparato mas complejo…

En conclusión este problema es muy discutido últimamente en España y lo va a seguir siendo si no se ponen medidas.

Unknown dijo...

Para comenzar,podemos decir que este texto abre un gran debate en sí.Al igual que mi compañera Janine,he de afirmar que este artículo dice mucho pero no deja nada claro,pero también he de decir que los puntos que señala son convincentes y reales.

En primer lugar,este texto muestra la real cara de la sanidad.Y es que en tiempos de crisis,sin saber porqué,buscamos un objetivo sea donde sea,y como tema principal,que lo es y siempre lo será ; el dinero.Sí,está bien que se aproximen a la idea de que el servicio sanitario se está yendo un poco de las manos,que ya no es lo que era,pero ¿tener que pagar para poder ir al médico?En mi opinión,esto sería un caso extremo.

Si bien como dicen,poner un coste por acudir a la consulta o subir los impuestos puede ser una vía de mejora,está fuera de mi opinión.Veo bien que establezcan la medida de "recortar" una pequeña parte el servicio sanitario,pero no excesivamente,ni mucho menos,tener que pagar doble por ello.

Por otro lado,el texto argumenta la cantidad de fármacos que se dispersan por el país,y hace incapié en los pensionistas.Por suerte,nuestro sistema está así,quien pueda hacer uso de las "recetas rojas" será por algún motivo,ya sea pensionista o tenga una enfermedad crónica y pueda sustentarse gracias a ello.En este caso,me parece injusto que traten de acortar el servicio,a personas que realmente lo necesitan.

Es verdad que muchas veces cuando vamos al médico,la mayoría de las personas que vemos son pensionistas,sí,pero...¿cómo podemos sacar medidas pensando en eso?

En segundo lugar,deberían de preocuparse más en el personal sanitario,en su salario.Este problema no es que venga ahora,siempre ha estado presente,pero...¿hubo un tiempo para sacarlo a la luz mejor que ahora?¡Excusa perfecta!

Se preocupan por la reducción de gastos,y lo que no ven,es que en muchos centros sanitarios,hay aparatos de escaparate,porque funcionar no funcionan ni la mitad.Yo por ejemplo el otro día acudí a urgencias y la báscula estaba rota,¡una báscula!Que no estamos hablando de aparatos excesivamente caros,no.Y es que la dejadez en los centros cada vez va siendo mayor,sobre todo el de aquí de nuestro pueblo,que vas a hacerte un electro y la máquina...¡rota!

Para concluir,debo de decir que en este tema hay muchos aspectos que debatir.Pero la mayor injusticia es que siempre está en dinero en medio,y más en los tiempos por los que estamos pasando.Lo siguiente será...¿hay que pagar para respirar?Sí,porque el aire cada vez está mayor contaminado y...¡Por favor!
Dejemos a nuestros políticos que tomen decisiones,que nosotros las acataremos.

Naila Mª Box Aguilar
Nº7,1ºBAT-B.

kateryn dijo...

El sistema sanitario español es uno de los mejores del mundo y tenemos que estar agradecidos por tenerlo ya que es muy envidiado por muchos países, como por ejemplo: Estados Unidos que pese ser la primera potencia mundial tiene un sistema sanitario muy malo ya que aunque gasta mucho dinero en asistencia médica obtiene malos resultados. En este país puedes estarte muriendo en la puerta de un hospital sino tienes un seguro médico. O sea, ¿qué es lo que pasa? Miles de personas pueden morir por esto ¿en qué mundo vivimos? Según unos estudios realizamos por la Universidad de Harvard 45.000 personas mueren anualmente en Estados Unidos por carecer de seguro de salud. Y nosotros muchas veces nos quejamos del que poseemos, suena algo ilógico ya que parece ser que entre más cosas tienes más cosas quieres.
Es verdad que tenemos que ser ambiciosos y tratar de querer más prestaciones ya que no podemos retroceder, cuando nos encontramos frente una dificultad siempre tenemos que intentar seguir adelante y buscar la mejor solución posible. Tenemos que financiar más investigaciones que ayuden a gente que realmente necesitan que se investiguen enfermedades poco comunes ya que no sabemos si en el futuro pueden ser un peligro

Pero no nos preguntamos ¿qué pasaría si nuestra asistencia sanitaria dependiera de un seguro?
Está claro que si fuese así controlaríamos más las veces que tendríamos que ir al médico y el dinero que gastaríamos en los medicamentos. No pediríamos tantos medicamentos para frenar un simple dolor.

Tenemos que ser conscientes de la suerte con la que corremos ya que hace no muchos años la cobertura sanitaria en España era casi nula y ahora es muy fácil tratar cualquier malestar con solo ir al centro médico, sacar cita y esperar en la consulta a que nos atiendan.
Sabemos la suerte que tenemos por lo tanto algunas personas abusan de esto, a mi parecer tenemos que cuidarlo y saber utilizarlo inteligentemente ya que si no lo hacemos tendrá grandes repercusiones para nosotros porque solamente nosotros seremos los afectados y cuando lleguemos a ese punto nos arrepentiremos y desearemos haber puesto fin a esto antes.

Luis F. dijo...

En la actualidad y luego de haber pasado por una buena economía el estado debe tomar medidas en todos los aspectos para poder salir de la crisis.

En la sanidad todos estamos de acuerdo que el gobierno ha cumplido con un eficiente sistema sanitario, pero si no se toman medidas ya, y si no se hacen reformas sanitarias, a largo plazo el sistema sanitario podría desplomarse debido a que los gastos médicos crecen a ritmos superiores al de la economía, hay que prevenir ahora pues en el transcurso de diez años la población española tendrá más de 65 años y la mayoría serán viejos. Para ello deberíamos tomar en cuenta algunos aspectos y analizar al mínimo todo gasto. La mejora en el avance tecnológico y en la atención médica a hecho que muchos extranjeros jubilados en otros países vengan a hacerse atender aquí, cosa que para mi manera de ver no está bien pues ellos deberían acceder a centros en donde ellos han trabajado y, han aportado para el engrandecimiento de dicho país, pues esto viene a constituir un gasto extra para la sanidad, esto se debería tomar muy en cuenta para hacer las reformas en lugar de acortar los salarios médico, ya que esto, trae como consecuencia que muchos profesionales de la salud emigren a otros países donde son mejor remunerados.

Además se debe concienciar a la población sobre el uso de ciertas sustancias como son el tabaco, el alcohol y las drogas que termina por afectar a la salud y por tanto repercute en los gastos sanitarios. Además es el momento de fomentar el uso de los medicamentos genéricos de bajo costo. Todos debemos colaborar de una u otra forma para que el sistema de salud siga vigente por bien de la salud.

LUIS FIALLOS 1ºBAC B

Unknown dijo...

Bien cierto es que la cobertura en cuanto a la sanidad en España es eficiente en comparación con otros paises,pero también es cierto que en cuanto a los instrumentos que utilizan en los centros médicos de muchos lugares son insuficientes para tratar a los pacientes,y si tanto dinero se destina a que estos centros tengan más y mejores instrumentos para que los médicos puedan trabajar mejor¿por qué son tan pocos los centros que disponen de ellos? estoy de acuerdo con mis compañeras en que no es justo que para hacerte una simple radiografia debas desplazarte a otros hospitales o centros médicos,ya que se supone que todos deben de disponer de estos aparatos ya que no es lo mismo acerte una radiografía(que puedes y se deberían de hacer en los centros de salud ) que hacerte pruebas para una enfermedad grave,que aunque en todos los hospitales deberían de disponerlos no solo unos pocos,los centros médicos no tienen porque ya que de esto se encargan los hospitales.
Todos los hospitales deberian de tener todos los aparatos para realizar todo tipo de pruebas,no hacer falta desplazarte a la otra punta del país teniendo un hospital a unos quilómetros.
Por otra parte si tanto dinero se destina a los médicos porqué viajan a otros países en los que aunque la calidad de vida sea peor prefieren ir y ganar más.Yo pienso que no deben de estar tan bien valorado y pagado el trabajo que desempeñan los médicos cuando cada vez son más los que se van fuera a trabajar y aqui vienen otros que como dice mi compañera no se enteran de nada,teniendo médicos tan competente aqui.

Jennifer Bernabeu Pozo 1ºBacB

Juan José Berná Vicente dijo...

Creo que nuestro pais, pionero en medicina y que tiene un sistema publico envidiable al cual esperan llegar paises como EEUU.

Claro que las medicinas son muy caras y eso las arcas publicas lo notan, tambien esta el factor de que los jubilados no pagan los medicamentos los cuales muchos son cronicos y para toda la vida, y la edad media de los españoles cada vez es mayor, lo que nos debe llevar a modificar el modelo sanitario en España, o que se introdujera el llamado precio simbolico.

Un cambio en el sistema sanitario sobretodo en cuanto si a la sanidad debe de ser pagada crearia mucha controversia y posiblemente una perdida de votos importante que es lo que ningun politico quiere y creo que por eso es por lo que aun no se ha dado el paso.

Juan José Berná 1º BAC"B"

Proyecto empresario dijo...

El sistema de sanidad que tenemos los españoles es muy “goloso” por eso muchos países como EE.UU. está intentando poner en marcha es te sistema.
Digo goloso refiriéndome a que cubre todas las asistencias y por supuesto los medicamentos,otra ventaja de los ciudadanos,que se lleva otra gran parte del presupuesto.

Este artículo habla de que a raíz de la crisis los presupuestos en la seguridad social se han disparatado por eso se están replanteando recortar gastos innecesarios. A mi por ejemplo esto me parece un poco raro,por que vale que se gaste bastante presupuesto en los mediacamentos y también en investigaciones que nos ayudan pero voy a poner el caso del sistema sanitario de Albatera. Somos más de 12.000 habitantes y ni siquiera tenemos ambulancia y tampoco un aparato para hacer una simple radiografía ya por descontado aparato para hacer ecografías.

Al fin y al cabo si no se hubiera producido la crisis también se hubieran tomado medidas y tampoco pasará mucho tiempo para que cambien el sistema que tenemos ahora.

Alicia Box Flores 1º BAC B

Carmen Maria dijo...

El problema que nos plantea este texto es que la sanidad española sufre una crisis ya que hay cada vez más jubilados, más personas que dependen de medicamentos en su día a día…
Un modo de solucionarlo es el copago, ya que como dice Luis Rodríguez : “aumenta el número de recetas por personas”. La mayoría de las personas mayores acuden al médico para pedir medicamentos o recetas innecesarias (aunque esto no sólo ocurre con los ancianos, a veces superemos el número de recetas permitidas).
Tenemos que poner un límite, aunque el dilema comienza cuando haya personas que necesitan medicamentos de verdad, como por ejemplo las personas que dependen de algún medicamento.
La crisis en la cual estamos inmersos actualmente nos retiene en el intento de poner una solución como el copago, ya que todo el mundo no puede permitírselo.
También se plantea que los profesionales no cobran lo debido y por ello se van a países extranjeros a trabajar. Por eso debemos de poner fin a eso con un sistema que nos ayude a la sanidad española y así aumentar el salario de los profesionales.

Carmen María Berná Ferrández 1BAC B

Javier Gil Rocamora dijo...

En mi opinión el problema de esto es que debido a la crisis que sufrimos ya que habrá que recurrir a los fondos sanitarios, antes no existía ese problema ya que la construcción nutría las arcas del estado no había problema para gastarlo en la sanidad. Lo que deberíamos hacer es concienciarnos y pensar si de verdad necesitamos acudir al médico, es decir si lo necesitamos de verdad ya que como algunos pensionistas hacen que es por cualquier motivo por insignificante que sea acuden a la consulta del médico y aprovechan y pasan la mañana en el centro de salud en la compañía de otras personas que hacen lo mismo y consideran las instalaciones sanitarias como centro de ocio o también se aprovechan de no tener que pagar nada para sustraer medicamentos de manera exagerada e innecesaria, con esto no quiero decir que los pensionistas tengan la culpa del problema ya que el gobierno español debería de tomar medidas.

Javier Gil Rocamora 1º BAC B

Sergio Serna Ferrández dijo...

Este artículo me parece que es muy interesante y que aporta datos que ya todos conocemos pero, en mi opinión, apoyo los comentarios de mis compañeros cuando dicen que el sistema sanitario público español, a pesar de ser un derecho para la persona, hay largas colas de espera para una simple consulta o para hacerte una prueba que de ella puede derivar que se detecte antes un cáncer o no.

En mi propio caso, he de contarlo porque me pasó muy recientemente: yo tuve que hacerme una prueba hace unas dos semanas y el mismo día pedí cita para el especialista y me han dado consulta para el 29 de septiembre!! osea dentro de 5 meses... ¿a qué extremo está llegando esto? Puede ser que una consulta más temprana pueda cambiar muchas cosas... pero claro,!qué ocupados que están los medicos! Y nada podemos hacer...

Creo que en nuestro país deberían poner algo más fácil el acceso a la carrera de medicina porque es una en las que la gente está muy interesada y por la nota no pueden nisiquiera hacerla en España.

Como conclusión, tengo que decir que no creo que gasten tanto dinero en modernizar los aparatos de los hospitales, ya que están muy limitados y lo que esto produce es que la gente tenga que acudir a la sanidad privada para poder recibir el trato adecuado a la enfermedad y con más rapidez.

Sergio Serna Ferrández

Anónimo dijo...

"Hay que rocortar gastos" es el lema de la Sanidad Española desde hace años. La población se envejece, la inmigración aumenta, etc. Hay que hacer reformas, eso esta claro.
Pero, a mi parecer sólo con hacer reformas no es suficiente, el problema de la sanidad española está, creo, más al fondo, desde su organización. Tomaré como referencia el sistema de sanidad francés, que no por ser el mejor me parece estar mejor organizado, en este país cada ciudadano puede acudir a su médico de cabecera, elegido por el, compra los medicamentos recetados, paga ambas cosas y luego la seguridad social con un sistema de hojas de reembolso le devuelve el porcentaje que les es asignado. Por otra parte todos los escaners, ecografos, TAC, etc, están centralizados en los hospitales y son los médicos los que derivan a los pacientes a los hospitales, lo que ahorra la necesidad de tener una cantidad excesiva de instrumentos medicos. Ahora bien, también es verdad que la cantidad de hospitales es mayor, pero se ahorraría en una multitud de centros de salud, de centros de especialidades, de centros de rehabilitación,etc que tenémos en España.
Además, en Francia también existe una bateria de seguros privados a cargo del paciente como en EEUU, (les mutuelles) pero en este caso, no es que ofrezcan una serie de médicos y servicios, como por ejemplo sucede con "Assisa" en España, sino que te aseguran la devolución de un mayor porcentaje del dinero invertido en sanidad y una mayor puntuación para asegurar las pensiones, por lo que al ciudadano no le da pereza pagarlo. Por lo que seria un buen sistema para incentivar a los que disfrutan de la sanidad española para inyectar capital a este ministerio que siempre está en deficit.

Dejando ya a un lado el modelo francés y volviendo a nuestro problema creo que hay que hacer "algo ya", porque los presagios son muy poco alentadores. Supongo que como siempre, habra que dejarlo en mano de los políticos con sus famosos "recortes", pero por lo que está en nuestras manos también debemos concienciarnos y ser un poco cívicos, si nos hace falta una caja de medicamentos y nos han recetado dos, la segunda no comprarla para tirarla a la basura, por un tiron muscular no acudir a urgencias de un hospital y por un dolor de muelas ir a un ambulatorio.


Ariana Martínez Cámara
1ºBacB

Anónimo dijo...

En mi opinión esto sólo demuestra en la situación en la que se encuentra España en este momento de crisis, hace unos años nadie pensaba en que la sanidad podía pasar por estos problemas.

Creó que unas de las medidas que deberían aplicar es poner un coste de dinero por cada visita y si luego al hacer las pruebas se demuestra que si que tienes algo devolverte el dinero.

Y la otra medida podría ser que los ancianos pagaran bastante más que una persona joven ya que ellos están cobrando sin hacer nada y hay jóvenes que están enfermos y no tienen dinero ni trabajo y ellos si que tiene que pagarse los medicamentos cosa que los mayores no hacen.

Y otra de las opciones creó que sería hacer como una especie de cartilla a cada persona con un límite de visitas, porque todos sabemos que mucha gente va al médico porque ya es una rutina en su día a día, así que con la cartilla se podría evitar esa clase de pacientes que no tienen nada pero van al médico.

Manuel Francisco Ricarte Simón 1bacb

alberto juan segura dijo...

Las costuras de la sanidad revientan:

Este articulo sobre el sistema sanitario español, me parece un estupendo tema de debate. Podemos decir que, en España, el sistema sanitario es uno de los mejores sistemas existentes actualmente en Europa y en el mundo. En España, todos los ciudadanos tienen derecho a la sanidad, pero de una forma u otra todos contribuimos para que el sistema sanitario se mantenga a un alto nivel de investigación y a un alto nivel de asistencia. En EEUU, la sanidad es privada, es decir que cualquier ciudadano americano que quiera ser asistido deberá pagar esa asistencia. En cuanto a lo que dice el artículo de que las algunas de las ayudas financieras destinadas a la sanidad española deberían ser recortadas, pues no estoy totalmente de acuerdo, ya que como dice el texto, actualmente existe un déficit de 12.000 millones de euros en la sanidad española, entonces si se recortan algunas de las ayudas a la sanidad, a cuánto ascenderá entonces el déficit? Lo que también se tiene que tener muy en cuenta seria, las necesidades de cada ciudadano, es decir, el grado con el que se tendría que asistir a cada ciudadano que solicite la asistencia, ya que no todos tenemos el mismo estado de forma ni la misma edad, de esta forma los más necesitados serán atendidos antes. La idea del copago no me hace mucha gracia, ya que el copago significa que cada uno de nosotros deberemos contribuir con dos o tres euros, pero no todos podemos contribuir con esos dos o tres euros más, entonces, si se pone en funcionamiento el copago, mucha gente que no pueda contribuir quedara excluida.

En conclusión, podemos decir que, el sistema sanitario español debe plantearse la idea de cómo funcionar en futuros años, y la forma de contribución de los ciudadanos.

jose alberto juan segura 1bacb